sábado, junio 30, 2007

Fragmentos de Muertos Incómodos (falta lo que falta), Capítulo III.






"Algo no me checaba y no encontraba lo que buscaba. Seguido así me pasa. Seguí buscnado sin saber qué mero buscaba, pero pensando que cuando lo encontrara lo iba a saber. Tomamos pozol ya tarde. Le pregunté a los que iban conmigo si el día ése de la desgracia llovió. Que sí. Que un poco bastante. Que todo el santo día. Que no escampó hasta la noche. Lo quedé pensando. Tardé. Aluego supe que no iba a encontrar lo que buscaba y que eso era lo que buscaba, que sea que buscaba no encontrar lo que buscaba. Los que iban conmigo me dijeron que está muy revuelto mi pensamiento. Les dije de que por sí."

"Y tuve miedo. Mucho miedo. Pero no un miedo a lo desconocido. No, era algo más racional. Miedo a lo conocido. Miedo a la larga historia de derrotas. Miedo a la costumbre y a la resignación que nos produce esa cuenta en la que siempre aparecemos en las restas y las divisiones, nunca en las sumas y las multiplicaciones."




Desde las montañas del Sureste Mexicano.
Subcomandante Insurgente Marcos.
México, diciembre del 2004.